Del poco dulce que come Ariadna casero son las torrijas, asi qeu siempre que las pide no dudo un minuto en hacérselo. Porque la verdad disfruto viendo como se lo come. Es capaz de comerse todas las que haga de una sentada y quedarse tan pancha.
Las torrijas son pasaos básicos que podéis darle el toque especial donde queráis. Con esta receta lo que vamos a conseguir es que queden super crujientes por fuera, pero muy tiernas por dentro
INGREDIENTES.
- 2 barras de pan duro de dos días.
- 1 rama de canela.
- 1 anís estallado.
- 400 cc de leche.
- 3 huevos.
- 150 g de azúcar.
- 2 cucharadas de canela en polvo.
- Aceite.
PREPARACION
1º Ponemos en un cazo a fuego medio bajo a calentar la leche, junto con la rama de canela y el anís estrellado, para emulsionarlos, o sea sin que llegue a hervir. Cuando lo tenga, apartamos del fuego y dejamos que temple en un bol.
2º Vamos preparando el resto de los ingredientes. Cortamos el pan en rebanadas de 1 dedo y medio, batimos los huevos, mezclamos el azúcar con la canela, y ponemos el aceite en una sarten grande a fuego medio alto a calentar. ( tener en cuenta que tiene que estar bastante caliente, porque cuando metamos las torrijas empezara a bajar la temperatura, pero tampoco queremos que se quemen)
3º Vamos dejando las torrijas en el bol de la leche, que no tengas mas de un dedo de leche, para que vayan absorbiendo, cuando vemos que están de un lado, 45 segundos o 1 minuto le damos la vuelta. Escurrimos un poco la leche sobrante. Y pasamos al bol del huevo, donde rebozamos la torrija. La llevamos a la sarten y freímos por ambos lados, hasta que este bien doradita.
3º Cuando estén las vamos colocando en una bandeja con papel absorbente para quitar el exceso de aceite.
4º Una vez templadas reboza con la mezcla de azúcar y canela. Y listas para comer.
NOTAS
La verdad es que son super fáciles de hacer, y aun mas de comer.
A nosotros siempre nos gustan recién hechas, aun calentitas, que es cuando mas tiernas están. Aunque estas 3 días después os aseguro que aun están super tiernas, y calentándolas un segundos en el microondas estupendas, si lográis que lleguen hasta ese día.
Se puede emulsionar con lo que mas os guste, limón y canela, horchata ( esta receta esta pendiente) o solo leche. Hay incluso algunos atrevidos que le agregan a la leche, mistela y cazalla, y creo que algún día, cuando no coman las nenas lo probare.
Que la leche este templada , también es importante.
Y el aceite también, no queremos que se hagan muy rápidas, pero tampoco que se sequen por tanta fritura. Si veis que al poner las torrijas en el aceite baja mucho la temperatura subirlo un poco, cuando haya vuelto a alcanzar la temperatura bajarlo de nuevo. O introducir menos torrijas en la sarten para que el cambio de temperatura no sea muy exagerado.
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